Carencia

Don Hugo vive en un baldío cerca del Hotel Bonarda, en Dorrego, Guaymallén. Seguramente hubo una época con casa y familia para don Hugo, seguramente hubo un trabajo o un oficio al que acudía diariamente, seguramente hubieron muchas cosas en su vida. Pero ya no están. Él vive en un simple baldío, solo...excepto por sus diez perros. Ellos son su familia ahora.

Posiblemente nunca se te ocurrió observar la interacción entre un indigente y sus perros. Deberías hacerlo alguna vez, te sorprendería y te enseñaría muchas cosas.

El Diógenes de Tabaré

Ante todo no se si hay algún entrenador de perros mas efectivo que un indigente. Caminan a su lado, tranquilos y atentos a su dueño. Apenas se alejan para volver rápidamente a su lado. No se pierden nunca. Si los llamaras, no te darían pelota. No le tocan sus pertenencias.

Cuando duermen son motivos de miles de fotos que circulan por la web. Porque la ternura que trasmite ese sueño en compañía, en medio de la soledad mas absoluta, no te la trasmite nada. Comparten mantas raídas y sucias, pegan sus cuerpos sobre el único cartón, se amontonan en un banco estrecho, se pasan la noche abrazados.

Ven a la gente pasar, apurada e indiferente, recibiendo a veces miradas despectivas o eventualmente piadosas, y nunca agreden ni molestan. Cuidan las "porquerías" del dueño como si de un preciado tesoro se tratase. A veces los ves tan flacos como su dueño, como si se confundieran sus huesos a la vista, compartiendo un destino cruel.  Otras veces te preguntás cómo hace ese hombre para tenerlos en tan buen estado. Sea cual fuere el extremo de su estado general, hay algo que no se puede cambiar: son inseparables.

Peladita es esta señorita que ves en la foto. Ella es uno de los diez perritos de don Hugo. Bien paradita en el hilo, no hay costillas hambrientas a la vista. Ella está muy bien cuidada. Pero su situación excede a los recursos de su dueño por mas amor que él tenga para darle.

Fué atropellada por dos autos en diferentes oportunidades. Con el primer choque perdió su patita de adelante. El segundo le quebró la cadera. El gran dolor que siente le impide apoyar una de las patitas de atrás, y adelante le falta una...Camina de a tres saltitos y se tira. Pero aún así, ahí está firme Peladita, junto a su dueño.

Todos tenemos carencias. Pero a veces nos equivocamos sobre quienes tienen mas que otros. Sería fácil deducir que don Hugo tiene muchas mas carencias que la mayoría. Yo no estoy de acuerdo.

Veo las adopciones frustradas de personas que devuelven perros porque les empiezan a molestar,  las buenas familias que en lugar de castrarlos tiran una y otra vez los cachorritos a la buena de Dios, esos seres despreciables que los maltratan a veces hasta matarlos sólo por diversión, o a aquéllos que tiran a los viejos o a un mestizo porque se compraron un cachorro de raza. Veo todo esto y me digo, qué pocas carencias tiene don Hugo en lo que respecta a sus perros...

En Estados Unidos existe una ONG llamada Pets of the Homeless formada por protectores que se concentran en ayudar a los indigentes en el cuidado de sus mascotas. Comprenden el alcance de la estrecha relación que existe entre ellos, de lo importantes que son el uno para el otro. Y así les permiten a estos dueños tan callejeros como sus perros, poder concentrarse en lo que mejor pueden hacer, amarlos.

No siempre una casa instalada y unos dueños que se precian de buenos vecinos, te garantizan la vida feliz de un perrito. Es tan simple que nos cuesta a veces entenderlo, ellos van a morir por quien les brinde su amor. Y el resto...el resto la peleamos juntos, codo a codo !. Los perros de don Hugo tienen dueño. Y es hermoso ver como estas mujeres lo perciben claramente. Nadie trata de separarlos. Todas comprenden que aquí hay fuego sagrado, ése por el que luchan día a día, hay amor por sus mascotas.

Si la operan a Peladita, va a volver a caminar. Asi que Marcela tomó la decisión. ¡Se opera!. La preguntona de Any se apresura a averiguar qué podría andar necesitando este señor para él  y para sus perritos. Melisa ya ha conseguido un lugar para conseguir el material necesario que les permita hacerles una "cucha gigante". ¡Y lo dice mientras agradece!. Y cada vez se suman mas ofreciendo su colaboración.

Es como que en pocas horas se hubiera formado un abrazo gigante con los cuerpos entusiasmados de estas mujeres, mientras encuentran maneras de resolver el problema, ya no de Pelada sola, sino de toda esa familia. Un abrazo gigante en medio del cual, si le agregás a don Hugo y sus diez perros bien amados...se convierte en una maravillosa y total... 

... AUSENCIA DE CARENCIA.

Publicación de Pedido de Ayuda. Seguí el lnk para colaborar :
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El costo de la operación de la perrita es de $ 900.- Una cifra fácil de reunir si son muchos. Para lo demás se necesitan brazos y buena voluntad.